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casa muda, La

La casa muda (La casa muda, 2010, Uruguay)
Dirección: Gustavo Hernández
Productora: Tokio Films
Guión: Óscar Estévez
Música: Hernán González
Fotografía: Pedro Luque
Género: En lugar de "La casa muda" a la peli podrían haberla llamado "la casa pa cagarte vivo del susto". No te digo na y te lo digo to
Intérpretes: Florencia Colucci, Gustavo Alonso, Abel Trinaldi, María Salazar
Sinopsis: Laura y su papi son contratados por un amigo para restaurar una casa en el campo que por lo visto está que se cae a cachos. Nestor, el dueño de la casa, les comenta que no suban a la planta de arriba, que el suelo está fatal y se puede romper. En fin, Laura y su padre se quedan a dormir en la casa y mientras el padre se duerme enseguida, a la muchacha le cuesta conciliar el sueño. Pero de pronto, la chica escucha un ruido misterioso...¿adivináis dónde? exacto, en la planta de arriba. Laura, con más miedo que un perrito chico, le pide a su padre que suba a ver quién es...y a partir de aquí empieza la película de terror. Abróchense los machos.

En esto del cine, cuando el dinero escasea hay que agudizar el ingenio al máximo para superar las limitaciones del escaso presupuesto y hacer una película interesante. La mejor manera de conseguirlo es modificando la forma de narrar la historia y alejándose de los caminos tradicionales y costosos (muchos actores, variados decorados y localizaciones, calidad de las cámaras, rodajes extensos, etc). Y de esta manera tan chula se hace de la necesidad virtud y se crean obras innovadoras, atípicas y fuera de lo convencional. El cine de terror está abonado para estos experimentos, porque estos enfoques son muy directos y realistas y la espectacularidad está a flor de piel. Para más inri, las campañas de promoción de estas películas suelen ser sensacionalistas y más exageradas que un autobús lleno de andaluces, haciendo incapié en la experiencia extrema que significa ver la película (y en ocasiones muestran escenas del público gritando presas del pánico). For example, tenemos las conocidísimas "El proyecto de la bruja de Blair", "REC", "Monstruoso" o "Paranormal Activity". Pues bien, "La casa muda" entra dentro de este grupo, así que avisados quedáis, porque estas películas no tienen término medio: o las odias o las amas. Muchos se quedan hechizados por el tratamiento directo de las escenas y otros piensan que es una estafa o la opera prima amateur de un estudiante de cine. Por ello, si te gustan las películas con su planteamiento, nudo, desenlace, con sus planos y contraplanos y sus buenos millones invertidos en el film, a lo mejor no te gusta el largometraje de Gustavo Hernández. Que conste que a mí sí me gustó un montón.
"La casa muda" es un ejercicio de tensión constante salpicada por varios sustos potentes que te cagas en las muelas del director por el mal rato que te ha hecho pasar. Realizada en varios planos secuencia (aunque digan que está hecho en un solo plano secuencia, la verdad es que no me lo creo), la película narra en tiempo real (o sea, que no hay elipsis ni intervalos de tiempo muertos ni acotaciones en plan "Y una hora después...") una actualización de unos crímenes reales ocurridos en Uruguay en 1941 (aunque la adaptación es muy suya y me parece que poco tiene que ver con lo que ocurrió realmente). Tras una breve y genial introducción (la protagonista se acerca lentamente a la casa), la película se centra exclusivamente en el tormento y la angustia que pasa la muchacha dentro de la casa. No obstante, que nadie espere ver bestialidades plan Saw 80 ni mucho menos. El terror de "La casa muda" es un miedo más contenido y sugerido, plasmando la inmediatez de una amenaza que está a punto de surgir, el horror constante de saberse atrapada y a merced de un asesino. Cámara en mano y con un planteamiento indisciplinado, el director nos sumerge, junto a la protagonista, en una experiencia aterradora, ya que nosotros, los espectadores incautos y masoquistas, acompañamos a la muchacha en su periplo por la casa de los cojones, y los sustos que se lleva ella también nos lo llevamos nosotros en primer plano. La película no da cuartel, la angustia es palpable y la tensión casi insoportable y muchas veces el espectador no puede evitar taparse los ojos y esperar con nerviosismo a que pase el mal trago. Indudablemente, la protagonista del film, Florencia Colucci, tiene una importancia capital en el éxito de la película, ya que su actuación realista la aleja del principal fallo de estos proyectos: la sobreactuación. Quizás el único defecto del film es su desenlace, una vuelta de tuerca innecesaria al más puro estilo Alexandre Aja, que le resta verosimilitud a la trama, con una mezcla incomprensible de fotografías picantes, orgías desenfrenadas, embarazos espontáneos y alucinaciones varias. Este churresco final con sorpresa incluida es gratuito y no tiene razón de ser, pero como la moda actual es esa, en cien años todos calvos...
Resumiendo: "La casa muda" es una gran película de terror y suspense, con un par de sustos increíbles y un desarrollo verosímil e inquietante. Lástima que su final no haya por dónde cogerlo, pero en fin, nadie es perfecto. Esperemos que la película sea la punta de lanza de un nuevo cine de terror uruguayo para disfrute mundial y regional.
Aquí os dejo el trailer de la película, cortesía de trailersyestrenos.

Eskalofrío

Eskalofrío (Eskalofrío, 2008, España)
Dirección: Isidro Ortiz
Guión: Hernán Migoya, José Gamo, Alejandro Hernández y Isidro Ortiz, basado en una idea original de Antonio Trashorras y David Muñoz
Música: Fernando Velázquez
Fotografía: José M. Civit
Género: Thriller rural, aunque también tiene escenas de terró y pilla cacho del cine de aventuras post-infantil, como "Los Goonies" pero en la España profunda
Intérpretes: Junio Valverde (como el pequeño vampiro), Berta Ros (fant total de Mowgli), Mar Sodupe (Madre coraje), Francesc Orella (como el pueblerino palote), Jimmy Barnatan (¿quién dijo "encasillamiento"?), Blanca Suárez (como la novia del vampiro)
Sinopsis: Santi es un chaval que tiene una enfermedad en la piel que si le da el sol se achicharra vivo, por lo cual lleva una vida nocturna bastante sosa, porque ninguna tía quiere estar con él sexualmente hablando. Una tarde, el médico de Santi le dice a la madre que se tiene que llevar al nene a un pueblo de la España profunda donde no dé tanto el sol, que ya tiene la piel bastante jodida y como siga así las va a pasar putas. Por este motivo, madre e hijo se van a un pueblo perdido de la geografía montañosa que tiene de todo: su colegio público, su charca refrescante, su bar-colmado, sus catetos salidos y sus misteriosos descuartizamientos de ganado. Aunque en un principio a Santi todo le va de lujo (incluso le sale una novia potente, el mu cabrón), la cosa se tuerce bastante cuando en mitad del bosque aparece un chaval que tiene el cuello cortado. Como Santi parece un vampiro con todo el rollo de la piel, sus paisanos le echan la culpa y quieren darle con el azadón en la cabeza. No obstante, la verdadera culpable parece ser una niña espeluznante con más mierda encima que la bombilla de una cuadra. Pero ¿qué es la niña?: ¿Un fantasma? ¿Una mutación genética? ¿Un extraterrestre? Lo único seguro es que la niña viene de Alemania.

Hay películas que si te las tomas en serio, no hay por donde cogerlas, pero si las ves con un poquito de sentido del humor, están muy bien. Esto es lo que ocurre con "Eskalofrío", un ligaillo de géneros y subgéneros delirante y psicotrópico, que para disfrutarla a tope no hay que racionalizarla en demasía. El argumento es tan absurdo y surrealista que es imposible tomárselo en serio, aunque, gracias a ello, la película es muy divertida y entretenida, sobretodo para nosotros, los frikis del mundo.
El film se puede dividir en tres partes muy diferentes entre sí: el primer segmento es muy equilibrado, serio, comedido e incluso tiene drama humano y conciencia social. Tras una primera secuencia-sueño impactante y espectacular (y también un magnífico reclamo comercial), el director nos presenta el planteamiento del film con un buen ritmo, sin prisas pero sin pausa, desplegando a los personajes (tópicos pero sin insultar la inteligencia del espectador) y estableciendo sin demoras aburridas el hilo conductor del film (la enfermedad del chaval y su exilio bucólico). Después viene la parte más misteriosa e inquietante de la película, cuando aparecen los primeros muertos y las primeras pistas del misterio. Isidro Ortiz sabe dosificar muy bien el suspense, sugiriendo el terror más que mostrándolo y transformando la belleza campestre en un lugar claustrofóbico y angustioso. Desgraciadamente (o afortunadamente, según se mire) la tercera parte del film es un desmadre con todas las letras, y los guionistas se sacan de la manga viajes a África, monjas siniestras, padres adictos a las máquinas tragaperras, catetos degenerados sexuales, turbas linchadoras, amores platónicos, adolescentes jugando a detectives y un final sorpresa que no lo es tanto, mezclando de forma indigesta el género del misterio y del terror con cualquier libro de aventuras infantiles de "Los cinco" de Enid Blyton y con la película de Alfredo Landa, "Vente a Alemania, Pepe". Que yo me pregunto en voz alta como el que no quiere la cosa ¿de verdad creía el director que el espectador iba a aceptar semejante potaje sin indignarse o sin descojonarse de la risa? Pobrecico, que ingenuo.
En fin, "Eskalofrío" es una película muy desequilibrada y muy irregular, pero también tiene sus cosas buenas, of course. Para empezar tenemos a Mar Sodupe, interpretando a la madre de Santi, cuyo papel es fundamental al comienzo y a la mitad de la película y que goza de una sólida interpretación gracias al buen hacer de Mar (aunque desgraciadamente, el personaje perderá fuerza a medida que avanza la película, tocando fondo cuando aparece de la nada el padre ausente y ella lo acepta sin rechistar). También destaca en la interpretación Francesc Orella, otorgándole a su personaje muchos matices interesantes y necesarios para el desarrollo y el desenlace de la trama, aunque al final también me lo desgracian con un giro absurdo del guión. El resto de actores hacen un trabajo correcto aunque tampoco es para tirar cohetes y en el museo de los horrores quedan los patéticos ataques de pánico de Junio Valverde, que no se los cree ni la madre que le parió. Como ya dije en un principio, las escenas de misterio están bien, y las de sangre y gore, también, con unos cortes de tendón de los tobillos que dan mucha dentera. Además del espectacular comienzo, la peli también cuenta con otra escena cañera, cuando Erika decide visitar a Santi a su habitación, metiendo el director unos planos subliminales sensacionalistas pero efectivos que quedan muy espeluznantes. Tampoco podemos obviar la belleza de los exteriores, rodados en el norte de España en diferentes localizaciones. Los paisajes son de Asturias, concretamente de Somiedo y de San Juan de Beleño en Ponga, y la casa y los bosques son del valle de Baztán, en Navarra. A Isidro Ortiz hay que reconocerle el mérito de rodar muchas escenas en mitad del campo y de noche, lo cual no es nada fácil y jode un montón. En cuanto a la visión del mundo rural que tiene la película, es bastante ambivalente. Al principio da mucha nostalgia, sobre todo si de pequeño ibas a menudo al pueblo a ver a los abuelos. Pero a medida que avanza la película los tópicos no paran de aparecer, siendo el más insultante el del final de la película, que parece que si llevas minifalda en un pueblo de España va a aparecer un cateto con boina para violarte.
Resumiendo: "Eskalofrío" es un pésimo thriller rural sin coherencia ni verosimilitud, pero como peli de terror friki está muy bien, con sus risas y sus sustitos.
Aquí os dejo el trailer de la película, cortesía de jona2031.



Y aquí os dejo un video-clis guay, cortesía de marox91.

llave del mal, La

La llave del mal (The skeleton key, 2005, USA)
Dirección: Ian Softley
Guión: Ehren Kruger (en la portada pone que es el guionista de "The ring", así que será verdad...
Género: ¡Joder con el Judú!
Intérpretes: Kate Hudson, Gena Rowlands, John Hurt, Peter Sarsgaard
Sinopsis: Caroline es una muchacha muy buena (y que está idem) que se dedica a cuidar a enfermos terminales, pero al final acaba mu harta porque en el hospital son unos insensibles y cuando se muere la gente lo echan en un saco sin contemplaciones y a otra cosa, mariposa. Por eso Caroline se despide de su trabajo, pero como necesita la pasta para pagar sus estudios de enfermería decide cuidar a un enfermo (que al pobre le dio una embolia y no puede hablar) en una mansión perdida en los pantanos de Louisiana. Al poco tiempo, Caroline se huele la tostada de que algo raro pasa en la casa y se pone a curiosear, descubriendo que en el ático hay un montón de objetos raros relacionados con el judú (que es la versión cabrona del vudú). La principal sospechosa es la esposa del enfermo, pero ella no sabe no contesta...

"La llave del mal" parece una película muy seria, muy profesional y muy de cuello blanco y smoking pero en fondo no lo es tanto. Su puesta en escena sobria, su ritmo narrativo lento y pausado, la ausencia de grandes escenas de acción o la presencia de gente viejuna (Gene Rowlands y John Hurts) pueden hacernos pensar que estamos viendo una película muy filosófica y metafísica, muy de gente adulta, madura y sofisticada, porque algo que tiene el ritmo del caballo del malo no puede ser frívolo. Pero no, señoras y señores, la frivolidad y la simpleza tienen muchas caras y una de ellas es la pretenciosidad, y esta peli es un poquito pretenciosa, pero sólo un poquito, que conste, que la peli se puede ver con diversión porque tiene bastantes elementos del cine de terror serie B que paso a enumerarles. Para empezar tenemos a esa pedazo protagonista que está más buena que el pan, una Kate Hudson en todo su esplendor (con escenas en braguitas y en la ducha incluidas) que entretendrá a los machos alfa más reticentes a ver una película sin tiros ni hostias. Las motivaciones de su personaje son bastante endebles, enchufándonos un trauma familiar con el padre para justificar ese emperramiento por quedarse en la mansión para proteger al yayo. Después tenemos ese tratamiento superficial, gratuito y estereotipado del sur de los Estados Unidos, con sus negros supersticiosos y sus terratenientes sacados de lo que el viento se llevo, quedando todo muy tópico, a historia contada mil veces ya. Después tenemos el tema del polvo de ladrillo, que funciona como la cruz y los ajos contra los vampiros, y que se convierte en un recurso facilón para contrarrestar a los amigos del judú. Y por último tenemos ese final sorpresa, atípico y bastante espeluznante, que revela todos los misterios de la película de un sopetón y que demuestra que el film no es una obra maestra de sobriedad ni tensión, sino un juego de artificio o una bomba de relojería bien engrasada que al final hace un inteligente ¡pun!
Lo dicho: película de terror y misterio serie B (pero con un gran presupuesto) entretenida y resultona, con final sorpresa y tía potente, pero poco más. Se la recomiendo a todos aquellos que necesiten una excusa cultural para ver películas de terror, porque su fotografía y su guión con más trampas que una peli de chinos engaña bastante y da el pego de cultureta.
Aquí os dejo el trailer de la película, cortesía de TrailersTeca.


hole, The

The Hole (The Hole, 2001, GB)
Dirección: Nick Hamm
Guión: Ben Court y Caroline Ip basado en la novela de Guy Burt
Género: Thriller y terror psicológico
Intérpretes:
Thora Birch, Keira Knighley, Desmond Harrington
Sinopsis:
Cuatro estudiantes ricachones con ganas de emociones fuertes y más calientes que el palo de un churrero se escaquéan de una excursión del instituto para pasar el fin de semana en un antiguo bunker subterráneo. Lo malo es que se quedan encerrados un mes y pico y claro, la situación se pone un poco tensa.

En su día, "The hole" sorprendió (negativamente) a mucha gente ya que todo el mundo esperaba la típica película slasher mata-adolescentes o algo super-gore plan "Saw" y se encontraron con otra cosa más oscura, intensa y desagradable. La peli no es para nada un slasher y sí tiene mucho de suspens y misterio (con un poquito de terror psicológico). Su guión es muy interesante y te coge continuamente desprevenido (aunque su final es precipitado y poco creíble) y la continua degradación de los personajes en el bunker está muy conseguida. En fin, para todos aquellos que echaron pestes al verla les invito a un segundo visionado más indulgente. No es la mejor película de terror del mundo pero sí tiene su miga. Además, Thora Birch está genial en su papel de colegiala-psicópata y podremos ver a mi Keira Knightley antes de hacerse famosa con los piratas.
La canción del video es de Fangoria y se titula "Eternamente inocente".


Y hablando de mi Keira, cuando la muchacha se hizo famosa, los productores sacaron otra portada más acorde con el argumento de la peli. Viva la sutileza.