Mostrando entradas con la etiqueta Películas años 60. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Películas años 60. Mostrar todas las entradas

tiempo en sus manos, El

El tiempo en sus manos (The time machine, 1960, USA)
Dirección: George Pal
Productora: Metro Goldwyn Mayer
Guión: David Duncan basado en la novela de H. G. Wells
Música: Russell García
Fotografía: Paul C. Vogel
Género: máquinas en el tiempo decimonónicas y futuros distópicos en los que la humanidad se ha vuelto gilipollas (más aún, quiero decir)
Intérpretes: Rod Taylor, Alan Young, Yvette Mimieux, Sebastian Cabot
Sinopsis: Lugar: London; Época: Último día del siglo XIX (en realidad no, pero bueno); George es un peazo de científico que me ha construido una máquina capaz de desplazarse por la cuarta dimensión, esto es, ir de lante y pa trás en el tiempo, porque ya está harto de las guerras humanas y quiere ir al futuro en busca de la sociedad utópica de paz, progreso, concordia, tolerancia y tías buenas. Ante la incomprensión de sus amigos, que se han tomado a chirigota el tema de la cuarta dimensión, George se lía la manta a la cabeza y viaja al futuro a ver qué pasa. Tras salvarse por los pelos de una explosión atómica, George llega al año ochocientos dos mil setecientos uno y allí descubre una comunidad de jovencitos ários que sólo piensan en retozar bajo el sol y que, además de analfabetos, son imbéciles. Desengañado, George da media vuelta y decide volver a su época pero entonces descubre que su máquina del tiempo no está ¡My god! ¿acaso se la ha llevado la grúa porque estaba mal aparcada? No hijo, que se la han llevado los Morlocks, una variante humana caníbal, azul y cromagnón.

"El tiempo en sus manos" es una verdadera maravilla de película humana y una joya inolvidable de nuestra infancia. Su mayor virtud reside en su sencillez, en la sinceridad de sus planteamientos y en su deseo de ser una eficaz historia de aventuras y ciencia-ficción. Por todo ello, la obra de George Pal se ha convertido en un indiscutible clásico que, como la máquina de George, es a prueba del paso del tiempo y sigue entreteniendo igual de bien ahora, en el siglo XXI, como en el día de su estreno.
Lo más meritorio del film es su mensaje pacifista y cultural. Recordemos que la película fue realizada en plena guerra fría, con la Unión Soviética y Estados Unidos tensando la cuerda del enfrentamiento nuclear que tuvo su máximo exponente en 1962 con la crisis de los misiles de Cuba. La película narra la insensatez autodestructiva del ser humano, que en lugar de establecer lazos de tolerancia y respeto con sus semejantes, se empecina en imponer su punto de vista por la fuerza de las armas. Y claro, tanto va el cántaro a la fuente que al final se acaba rompiendo, sobre todo si tienes misiles nucleares que pueden destruir el planeta 20 veces. George Pal refleja a la perfección el anhelo del protagonista (alter ego de H.G.Wells) de encontrar una sociedad cuyos máximos valores sean la tolerancia y el conocimiento, y que, por una vez en la historia de la humanidad, la razón se imponga a la violencia (pues espera sentado, guapo). Otro elemento a destacar es el aislamiento que sufre el protagonista (tal y como lo debió padecer Wells), cuya mente progresista y lógica cosecha el rechazo, la incomprensión y la burla de sus coetáneos, que se aferran a cómodos conceptos caducos y reaccionarios en lugar de darle al coco y pensar por una vez en su vida.
La estructura argumental de la película es original y dinámica, compuesta por un gran flashback central que narra las aventuras de George en el futuro. Al igual que el hilo conductor del film, la trama juega con el espectador y va hacia delante y hacia atrás en el tiempo. La peli comienza con el protagonista recién llegado de su lucha contra los Morlocks para, acto seguido, retroceder una semana, al momento de la presentación de la máquina del tiempo a sus amigos (por cierto, con amigos como éstos quién necesita hijos de puta...), para luego visitar varias épocas históricas (marcadas irremediablemente por la guerra y por el miedo atómico) hasta llegar a la utopía analfabeta de los Eloy y los Morlocks. A partir de aquí, la historia evoluciona y pasa de ser una peli de ciencia-ficción a una "moster movie" con sus grotescas abominaciones degustadores de carne ária y con sus cuevas truculentas llenas de telarañas. Y después de darse de hostias con los morlocks y de comerle la boca a Winnah, George vuelve a su época y al principio de la película. No obstante, aún nos queda su maravilloso final (que además de ser una vuelta de tuerca es una vuelta al futuro), que rompe el mensaje nihilista del film para otorgarle un espíritu decididamente optimista y esperanzador.
Pero, por supuesto, hablar de "El tiempo en sus manos" es hablar de la magnífica interpretación de Rod Taylor, que el solito lleva todo el peso de la película y que, en última instancia, es lo más destacable del film. Rod Taylor supo darle a su personaje un aire erudito sin restar un ápice su humanidad. Otro rasgo del personaje es su fabulosa curiosidad y su irresistible deseo de adquirir conocimientos, aunque este entusiasmo se ve a menudo ensombrecido por el toque trágico, amargo y desesperado de una búsqueda en pos de un futuro mejor.
La película fue un éxito rotundo y marcó a varias generaciones de espectadores (y lo seguirá haciendo por muchos años). Su influencia en el cine de ciencia-ficción fue importante, siendo su máximo exponente "Los pasajeros del tiempo" ("Time after time", Nicholas Meyer, 1979), con H.G. Wells (interpretado por Malcom McDowell) persiguiendo en su máquina del tiempo a Jack el destripador. Además, en el 2002 hicieron un remake de la peli, "La máquina del tiempo", dirigido por Simon Wells, que como todos los remakes, tuvo una dispar y extrema aceptación.
En fin, "El tiempo en sus manos" es una obra maestra del cine de aventuras y de ciencia-ficción. Hay que verla cuantas más veces mejor (yo ya he perdido la cuenta). Aquí os dejo el trailer de la película, cortesía de IAmOnlyLove.

libro de piedra, El

El libro de piedra (El libro de piedra, 1968, México)
Dirección: Carlos Enrique Taboada
Productora: Producciones AGSA
Guión: Carlos Enrique Taboada
Música: Raúl Lavista
Fotografía: Ignacio Torres
Género: Versión fantasmal de los niños cantores de Viena, con el libro gordo de Petete debajo del brazo. También hay algo de magia negra y lagartos resucitados
Intérpretes: Marga López (la institutriz que es igualita a Sherlock Holmes porque lo descubre todo), Joaquín Cordero (el padre millonario más serio que un sobre de Hacienda), Norma Lazareno (¡Nuestra querida Kitty, la estudiante exhibicionista! que aquí interpreta a una madrastra y sufridora en la vida, con más miedo que un perrito chico), Aldo Monti (el padrino pintor, bohemio, vividor y que maneja fatal, sobretodo cuando lo asustan), Lucy Buj (la niña con más peligro que una caja bombas)
Sinopsis: Julia Septién es una institutriz muy buena persona contratada por un millonario para que le cuide a su hija Silvia, que por lo visto la pobre sufrió un ataque de meningitis y se quedó un poquito trastornada de la cabeza. La niña sólo tiene dos amigos: un cacho lagarto así de grande y un niño llamado Hugo, que por lo visto es una estatua del jardín, esculpida en piedra en un pueblecito austriaco durante la Edad Media. Y como una imagen vale más que mil palabras, aquí pongo la foto del monumento:


Dos cosas se pueden apreciar de la imagen adyacente. Una: que el niño tiene una sonrisa de cabrón que tira de espaldas; y dos: que en las manos tiene un tocho de libro que o bien es un cómic de Spirou y Fantasio o bien es un libro de magia negra y el nene está planeando alguna maldad. Pues más bien lo segundo, porque la niña se pasa todo el día diciendo que Hugo va a visitarla y que juega con ella a subirse a los tejados de los campanarios, a hacerle vudú a la madrastra o a resucitar lagartos difuntos. Nadie la cree, of course, pero cuando empiezan a aparecer los primeros muertos, todos se acuerdan de Hugo y de la santa madre que lo parió.

Tras el mega-éxito de "Hasta el viento tiene miedo", Carlos Enrique Taboada prosiguió su tarea de enriquecer el cine fantástico mejicano con otra película de terror y fantasmas, dándole una vuelta de tuerca (y nunca mejor dicho) al género de las almas en pena añadiendo un factor nuevo y siniestro: el mundo infantil y su crueldad inherente. Tomando como inspiración la novela de Henry James "The turn of the screw", pero despojándolo de su contenido sexual, Carlos Enrique Taboada estructura un relato trágico y macabro donde los niños son víctimas de la ambición, incomprensión e insensatez de los adultos. No obstante, gracias a una retorcida justicia poética, las víctimas se convertirán en verdugos, movidos por la crueldad y el odio hacia los vivos.
En el reparto del film repiten dos actrices que ya aparecieron en "Hasta el viento tiene miedo" pero en unos registros completamente diferentes. Por un lado tenemos a Marga López, la inflexible y castrante autoridad del internado femenino que en esta ocasión interpreta a un personaje lleno de bondad, ternura y comprensión, la institutriz de Silvia, una mujer que posee una comunicación especial con los niños debido a que ella misma sufrió una experiencia traumática con su propia hija (que aunque en la película no lo aclaran, por lo visto a su niña también le faltaba un hervor y la encerraron en un manicomio, con la posterior muerte de la chiquilla). Julia es la amiga y confidente de Silvia, y aunque en un principio sufrirá las iras de Hugo, el chavea decide perdonarla en deferencia a Silvia. Uno de los momentos más importantes de la película es cuando Julia ve por primera vez la estatua de Hugo: Carlos Enrique Taboada resuelve la escena con unos primeros planos consecutivos y rápidos de la estatua y Marga López, en la que la mujer, poco a poco, se siente seducida y hechizada por la estatua, esbozando una sonrisa cómplice y aportando a la escena mucha ambigüedad y extrañeza. Resumiendo: la convincente interpretación de Marga López demuestra la variedad de registro de esta estupenda actriz. Por otro lado, tenemos a Norma Lazareno, nuestra desvergonzada Kitty de "Hasta el viento tiene miedo", que aquí interpreta a la madrastra de la niña Silvia. Para empezar, señalar que en esta ocasión tiene un mejor estilismo y su peinado la favorece mucho ya que parece incluso más joven que cuando tuvo que interpretar a la estudiante casquivana el año anterior. Su personaje es muy ambivalente, porque por un lado tiene más miedo que un perrito chico y Hugo cabrón la putea cosa mala durante toda la película, lo cual inspira mucha lástima en el espectador; pero por otro lado, sobre todo al final del film, motivada por el miedo, la madrastra se convierte en un bicho malo que intenta subyugar a la niña por la fuerza, entre otros motivos para que Silvia la tome en serio y deje de asustarla con el Hugo de los cojones. Con el cromosoma XY, tenemos al millonario padre de la niña, que representa la autoridad y la inflexible racionalidad (y que al final desencadenará la tragedia) y el padrino, un pintor bohemio chulo-putis, que tomará partido por ambos bandos y al final se llevará palos de todo el mundo. Por último, Lucy Buj interpreta a Silvia, la niña hechizada, aportando a su personaje el grado justo de inocencia y desamparo (a fin de cuentas, la pobre está bajo el embrujo de Hugo y no puede vivir una infancia normal) pero también de crueldad y refinada maldad (dando matarile a todo lo que le molesta, ya sea animal, vegetal o mineral). También la niña es un rato pava, pero en fin, está en la edad.
Pero no nos engañemos, el que corta el bacalao en la película es Hugo, que con su presencia invisible y ominosa, tiene a todo el mundo acojonadito, y a pesar de que su trágica historia inspira lástima, el niño es un egoísta y hará todo lo posible para que no le aparten de su vera a la niña, su única amiga en varios siglos. No obstante, podemos sacar otra lectura, más siniestra y cruel, donde las acciones de Hugo están encaminadas a la consecución del terrible y alucinante desenlace, obra maestra de Carlos Enrique Taboada y que deja al espectador angustiado y con un mal cuerpo a nivel general. Por cierto, Hugo sólo sale dos veces en la peli, pero cuando aparece, es para cagarse vivo del miedo que da.
A nivel técnico, qué te voy a contar, pues que la película se hizo con pocos medios y en un tiempo record (algo habitual por aquel entonces) y que en ocasiones esta precariedad se nota en las localizaciones y en el abuso de diálogos melodramáticos. Pero pasando por alto este detalle, la película tiene de todo: muchos momentos de angustia, miedito, suspense e incluso acción, con rescate de la niña in extremis del techo de una iglesia.
"El libro de piedra" es una gran película de fantasmas que nada tiene que envidiar a su predecesora, ya que su atmósfera, su puesta en escena y su ritmo narrativo es similar a la de "Hasta el viento tiene miedo" pero en esta ocasión "Carlos Enrique Taboada" cuenta una historia completamente diferente, con mucha miga, mucho susto, mucha brujería y con un final para no olvidar.
Por cierto, la tetralogía de fantasmas del director se completa con "Más negro que la noche" (el gato Becquer vs. cuatro mozas jamonas) y "Veneno para las Hadas" (el mundo infantil bajo un prisma de fantasía, miedo y superstición).
Postdata: en el año 2009, Julio César Estrada hizo un remake de la película, por lo cual fue objeto de las iras de los fans incondicionales del film original. Más o menos lo mismo que le pasó a Gustavo Moheno cuando hizo el remake de "Hasta el viento tiene miedo". Pobrecicos, los frikis no tenemos piedad.
Aquí os dejo una escena de la película, cortesía de ecastillo90125.


Y como en toda buena película de terror, la música es un elemento fundamental para aconjonar al respetable público y en "El libro de piedra" el gran trabajo de Raúl Lavista aporta a la historia un toque bucólico, infantil y siniestro. Y para muestra, un video de You Tube cortesía de TheRrrodrigo

Terror en el espacio

Terror en el espacio (Terrore nello spazio aka Planet of the vampires, 1965, Italia)
Dirección: Mario Bava
Guión: Mario Bava, Alberto Bevilacqua, Callisto Cosulich
Género: Ciencia ficción (con naves, pistolas de rayos y jamonas) y terror angustioso
Intérpretes: Barry Sullivan, Norma Bengell, Ángel Aranda, Evi Marandi
Sinopsis: Dos naves espaciales de una civilización intergaláctica (a la que le gusta mucho el cuero ajustado) investigan unas misteriosas señales procedentes de un planeta perdido en la otra punta del universo. Dichas señales indican que existe más vida inteligente en el cosmos y van felices y contentos a descubrirla. No obstante, en cuanto se ponen a tiro de piedra del planeta, una fuerza gravitatoria del copón los absorve en plan bestia total y les obliga a aterrizar sin poner las luces. Todos los tripulantes se quedan desmayados menos el capitán, que es un picha brava, pero cuando se despiertan sus compañeros, los muy insensatos se empiezan a fostiar y a pegarse patadas a lo loco, que parecen que están dementes. El capitán los saca de la locura a base de hostias y una vez recuperados y peinados, se disponen a descubrir de una vez por todas el misterio del planeta de los cojones.

En una entrevista hace tiempo, entre versión definitiva y versión definitiva de "Blade Runner", Ridley Scott dijo que para hacer "Alien: el octavo pasajero" se había influenciado de tres películas mu chulas: "Star Wars", "2001: una odisea en el espacio" y "La matanza de Texas". Pues bien, al bueno de Ridley se le olvidó mencionar, no por casualidad, una cuarta influencia fílmica, la más decisiva y trascendente de todas ellas. Esta es, of course, "Terror en el espacio" de Mario Bava.
Pero ¡cuidado!, que nadie espere ver a un monstruo freudiano con cabeza de pene masacrando a la tripulación de un carguero espacial de sales minerales. El gran mérito de la obra de Mario Bava es saber unir de manera perfecta los elementos más carácterísticos de la ciencia-ficción y del terror, creando una atmósfera angustiosa, desconcertante, claustrofóbica y de cagarse vivo (en parte influenciada por las paranoias conspirativas de "la invasión de los ladrones de cuerpos" de Don Siegel).
Aunque tampoco nos engañemos, la peli espantará a más de uno e incluso provocará el cachondeo generalizado debido a la escasez de medios monetarios, traducidos en unos decorados de cartón piedra y de un utillaje entre lo camp y lo ridículo (aunque los trajes de cuero ajustado les sienta muy bien a las astronautas jamonas). No obstante, Mario Bava, como buen artesano que es, sabe superar estas limitaciones con maestría (y un pelín de poca vergüenza) haciendo que el peso de la trama se sustente en los personajes y sus diálogos, que algunos son para orinar y no echar gota de la cantidad de conceptos pseudocientíficos y paraespaciales que contiene por centímetro cuadrado: "Atención a todos los tripulantes: preparados para descender. Dentro de 60 fracciones de omega comenzaremos a acercarnos al planeta. La intensidad del campo gravitatorio se mantendrá sobre la onda momento de fuerza G-7. Sintonizad el desviador de meteoritos en el dispositivo electromagnético. Aplicad la tensión neurovascular. Suprimid las zonas corticales X-Z-Y. Conectad los mandos autónomos. Nos mantendremos a una distancia de dos parsec de la nave gemela Gallion. Accionar la señal de "orden recibida"." Cualquiera que pueda decir toda esta parrafada de manera convincente y sin jartarse de reír merece el premio Oscar mayer. Aunque lo mejor de la película es, como ya dije antes y me repito más que el ajo, su atmósfera opresiva, acentuada por el minimalismo de los decorados exteriores y el juego de luces con sus tonos fríos y calientes para potenciar sensaciones. Porque el secreto del invento es que Mario Bava no hace una peli de ciencia-ficción con toques de terror, sino al contrario: "Terror en el espacio" es una película de miedo y suspense, con su angustia y su horror cercano y primigenio (genial la escena de la resurrección de los muertos), donde los elementos galácticos son el vehículo para contar una historia clásica de terror, con sus espectros de ultratumba y sus fuerzas incontrolables que mantendrán en jaque y acojonados a los protagonistas del film, por mucha pistolita de rayos que tengan y por mucha nave espacial con campo magnético gravitatorio. Y no podemos olvidar ese toque de humor negro muy de Mario Bava justo al final del film, que rompe en pedazos la escasa seguridad que proporciona el terror cósmico, inquietando un poquito más al espectador.
Bueno, vale, que ya vamos acabando: "Terror en el espacio" es, claramente y para qué nos vamos a engañar, una película decididamente exploitation que intenta aprovechar el rebufo yanki de las pelis de Ciencia-Ficción para llamar la atención. No obstante, Mario Bava supera los límites de lo puramente comercial para crear una pequeña obra clásica del terror y de la ciencia-ficción, llena de personalidad, creatividad y calidad que merece ser recordada y reverenciada en museos y filmotecas, gracias a su buen hacer y a la influencia que tuvo en películas posteriores claves en el género. He dicho.
Y aquí os dejo un trailer de la película, cortesía de Punkymom76.
-


Charro de las Calaveras, El

El Charro de las Calaveras (El Charro de las Calaveras, 1965, México)
Dirección: Alfredo Salazar
Guión: Alfredo Salazar
Género: Héroes enmascarados en su lucha diurna con los monstruos de la noche (que salen por la mañana)
Intérpretes: Dagoberto Rodríguez, Pascual García Peña, David Silva, Alicia Caro
Sinopsis: Las villas de México sufren el ataque indiscriminado de numerosos monstruos infernales, como el salvaje Lobo-humano, el sanguinario vampiro siniestro y el diabólico jinete sin cabeza. Las víctimas suelen ser los pobres campesinos que inocentemente pasaban por ahí, que sin comerlo ni beberlo son merendados por semejantes bichos. Pero que no cunda el pánico, que por el horizonte se divisa una figura enmascarada a caballo que con su valor, sus puños y unos cuantos plomazos, va a restaurar el orden en los campos de México.
¡¿Es el Zorro?!
¡¡NOOOOOOOOO!!
¡¿Es el Coyote?!
¡¡NOOOOOOOOO!!
¡¿Es Batman e Robin?!
¡¡Qué NOOOOOOOO!!
Entonces ¡¡¿Quién es, por amor de dios?!!
Es el superhéroe más valiente del mundo. Es...¡EL CHARRO DE LAS CALAVERAS!
po vale.

Muchos dirán que el país con los super-héroes más grandiosos del mundo es Estados Unidos, con Supermán, Spiderman, Batman y un millón más, pero de eso nada, pelanas. Los mejores superhéroes del planeta (y del universo) son Mejicanos, más que nada porque son héroes de carne y hueso, reales como la vida misma, que te podías acercar a ellos y pedirles un autógrafo. El primero de la lista es el mítico e inmortal Santo, el enmascarado de plata, héroe de la lucha libre y salvador del planeta en sus ratos libres. Pero desde luego no fue el único, ni mucho menos. Aquí tenemos a uno de los super-héroes más...ehh...singulares del panteón de superhombres mejicanos, que aunque a simple vista parece un pelín cutre, posee un innegable carisma. Influencia clara de los héroes clásico del pulp y del cómic tales como La Sombra, el Zorro o Batman, El Charro de las Calaveras es un fenómeno de super-héroe (aunque a veces ande un poquito despistado). Su origen es igualito que el de Batman: tres criminales mataron a sus padres y él juró vengar su muerte. Por cada chorizo muerto se bordaría en la camisa una calavera (de ahí su nombre). Una vez cumplida su venganza, decidió dedicar toda su vida a combatir el crimen terrenal y sobrenatural, acompañado de un chaval (Juanito o Perico, según el calendario escolar) y Cleofás, un sidekick sanchopanzanesco cómico con más miedo que un perrito chico.
"El Charro de las Calaveras" es una película de acción y terror, aunque la nota predominante es el humor, más que nada por los pauperrimos efectos especiales serie Z que posee el film debido seguramente a la falta de presupuesto. Las máscaras de los monstruos son bastante lamentables y algunos bichos (como el murciélago vampiro) se nota a la legua que son de cartón. Además, muchas de las escenas presuntamente nocturnas son rodadas a plena luz del día, sin disimulo ninguno. No obstante, como ocurre con toda buena película serie Z, estos pobres efectos especiales no perjudican al film, sino que, muy al contrario, le otorgan una atmósfera entrañable y cómplice que realzan su valor y salvan del olvido a una película bastante mediocre, convirtiéndola en una joya Kitsch para analizar, alabar y, sobretodo, disfrutar (porque la risa está garantizada).
La película se divide en tres capítulos con un esquema argumental idéntico:
A. Aparece el monstruo y se carga a un campesino que andaba por ahí.
B. Aparece el Charro de las Calaveras y empieza una investigación para descubrir el paradero del bicho (aunque en el fondo no sirve para nada, porque el monstruo irá a por él). En este segmento generalmente aparece una moza de buen ver.
C. Tras algún tiro e hostia bien dada, el Charro acaba con el monstruo (aunque a veces es por pura casualidad).
La galería de monstruos es curiosa a la par que lamentable. En primer lugar tenemos a un hombre lobo (denominado aquí "Lobo-humano") que antes de convertirse en bicho debe transformarse en un esqueleto. Su punto débil no es la plata, sino los precipicios, ya que si se cae por uno, se muere (al contrario que los seres humanos). Además, también harán acto de presencia una bruja desquiciada y un zombi chivato. El segundo monstruo es el Vampiro Siniestro, con una máscara del todo a 100. Tiene la habilidad de hipnotizar a mujeres jamonas y de convertirse en un murciélago de cartón sujetado por hilo de pescar. Y el último monstruo es el Jinete sin cabeza, un criminal que en su día fue asesinado por pendejo y que un profesor le cortó la cabeza para estudiar su cerebro y claro, el jinete pilló un mosqueo impresionante y se pasó los siglos vagando por el mundo buscando su melón (ya que el profesor metió la cabeza en una caja de zapatos y se lo entregó a sus herederos a modo de recuerdo).
En fin, "El Charro de las Calaveras" es una película muy entrañable y divertida, que hará las delicias de los más pequeños (por su atmósfera comiquera y porque, en su ingenuidad, se creerán los pésimos efectos especiales) y también gustará a los adultos, porque la película es para partirse la caja de risa.
Aquí os dejo el corrido del Charro de las Calaveras, interpretado por el Trío Calavera, cortesía de querrequerre1.


-

noche de los gigantes, La

La noche de los gigantes (The stalking moon, 1969, USA)
Dirección: Robert Mulligan
Guión: Alvin Sargent y Wendell Mayes basado en una novela de Theodore V. Olsen
Género: Psychokillers apaches con más peligro que una piraña en un bidet
Intérpretes: Gregory Peck, Eva Marie Saint, Robert Forster y Nathaniel Narciso en el papel de indio sesino más malo que un dolor
Sinopsis: En el Far West, el ejército norteamericano encuentra a un grupo de indios en un descampado en plan okupa y deciden confinarlos en una reserva, pero de pronto descubren que entre los apaches hay una mujer blanca, que hace 10 años fue raptada y obligada a vivir entre ellos. Y para colmo de males la muchacha se tuvo que casar con el indio más bestia y bellotero de la tribu, teniendo un niño de la feliz unión. Pues bien, el ejército libera a la mujer y al niño, y como la pobre no tiene a dónde ir, un explorador del ejército que se va a jubilar decide acogerla en su rancho de las montañas. La buena noticia es que el explorador es Gregory Peck, todo un caballero que tiene sentimientos sinceros y bonitos hacia la mujer y su hijo. La mala noticia es que el antiguo esposo indio de la muchacha y padre de la criatura los está persiguiendo para darles matarile de la manera más sádica y cabrona del mundo y ya de paso el tío asesina a la mitad del estado de Colorado.

Antes de nada, empezar diciendo que "La noche de los gigantes" es, ante todo, una película del oeste, con sus vaqueros míticos, sus indios mu malos, sus escenas de caballos trotando, sus ranchos con las terneras mugiendo, los desiertos con las diligencias y sus tiros payun! payun!. Y al que no le guste el tema se puede cagar en mis muelas por venderle esta película como una de asesinos en serie. Pero es que el cogollo de la película va de eso, de un psychokiller imparable, indestructible y sanguinario que nada tiene que envidiar a Jason Voorhees o a Michael Myers en sus días buenos. La peli empieza como un western clásico, con su héroe crepuscular a punto de abandonar la mala vida de tiros y aventuras para sentar la cabeza allá en el rancho grande y como el tío es más seco que una pasa y un solitario empedernido, no tiene ni familia ni niño ni perro que le ladre. Pero como el hombre es humano y tiene necesidades sentimentales decide adoptar a la madre y al niño para así tener una familia y no pasar sus último años en soledad. La grandeza del asunto consiste en que el personaje de Gregory Peck sabe que si se lleva a la familia consigo, el psychokiller apache irá a por él para matarlo, pero él nada, en sus trece. A medida que avanza la película, el western se transforma poco a poco en algo más siniestro y escalofriante, sobretodo cuando empiezan a aparecer los cadáveres de 20 en 20, asesinados impunemente por un asesino que parece una fuerza maligna de la naturaleza. El director juega sus cartas muy inteligentemente porque en ningún momento muestra el rostro del indio asesino y el espectador, en el mejor de los casos, sólo puede ver su figura en la lejanía, imponiendo de esta manera una amenaza constante que crea una atmósfera asfixiante y claustrofóbica a lo largo de la segunda parte del film, porque ni los protagonistas ni los espectadores saben cuando y dónde va a caer el siguiente machetazo. La lucha final entre Gregory Peck y el Psychokiller es antológica, emocionante e incluso roza los límites de la fantasía y el terror porque el asesino parece que está hecho a prueba de balas, el muy cabrón.
En el lado negativo del film, está lo de siempre en una película del lejano oeste: los indios siempre son los malos y salvajes y los vaqueros siempre son los buenos y civilizadores (aunque en esta ocasión el director denuncia el racismo de los rostros pálidos). Además, Robert Mulligan deja caer un detalle perturbador e incómodo al insinuar que el niño del asesino ha heredado su locura y sus ansias de sangre. Pero en fin, hacemos la vista gorda y disfrutamos del film, que para eso está.
"La noche de los gigantes" es un western atípico y muy interesante que llamará la atención a los amantes de este género nuestro del terró, porque comparte mucho de sus elementos esenciales para crear una sensación de inquietud, suspense y acojone.
Aquí os dejo un trailer artesanal hecho por caligvra.

violación de la vampira, La

La violación de la vampira aka La reina de las vampiras (Le viol du vampire, 1967, Francia)
Dirección: Jean Rollin
Guión: Jean Rollin one more time
Género: Vampiresas de arte y ensayo adictas a la sangre y al top-less
Intérpretes: Solange Pradel, Jacqueline Sieger, Bernard Letrou, Ursule Paule
Sinopsis: CUATRO hermanas (C-U-A-T-R-O, no dos) viven en un castillo asustadas perdidas porque piensan que son vampiresas de cientos de años de antigüedad que en su día fueron puteadas cosa mala por los catetos del pueblo (a una la violaron y a otra le reventaron los ojos y no ve). Lo que no saben las pobres es que todo es mentira, que el culpable es un viejo verde que les come el coco para así poder trajinárselas sexualmente. Pero que no cunda el pánico, que de la ciudad viene un psicólogo muy polluo (acompañado de su amigo y la novia de éste, que vienen a darle apoyo moral) para hacerle un psicoanálisis y curarlas del todo. Y claro, aquí se lía parda. Por un lado, el viejo verde pilla un mosquéo de órdago y provoca a los catetos del pueblo para que se carguen al señorito de la ciudad. Y por otro lado, la reina de las vampiras tampoco ve con buenos ojos que le quiten adeptas.
-¡Un momento! ¡Rebobina! ¿pero no dijiste al principio que las tías no eran vampiresas?
-Anda, pues es verdad.
-Entonces ¿en qué quedamos?
-Pues te ves la película, fresco, que hay que dártelo todo hecho.
-Vive la France

Para empezar, señalar que el "corta y pega" del world ha hecho un daño inimaginable a la cultura universal y de provincias, porque en todos los sitios del internet donde he buscado información técnica de la película la sinopsis es la misma y encima está equivocada (pone que son dos hermanas y en realidad son cuatro y además dice que son tres tíos los que vienen a ayudar a las vampiras jamonas y de eso nada, que son dos tíos y una adorable muchachita que está como un queso francés) lo que indica que ninguno se ha tomado la molestia de ver la película ¡Mal hecho, tunantes, que aunque la película sea un pelín lenta y arisca de ver, hay que visionarla antes de opinarla!
En fin, al lío. Los que busquen morbo fácil con lo del título mejor que se den la vuelta porque los tiros no van por ahí. En la peli no hay agresiones sexuales ni cópulas salvajes morbosas. Es cierto que hay muchos desnudos (sobre todo glándulas mamarias) pero los desnudos de la película son sobre todo artísticos, evocando un sutil erotismo que refuerza el tono poético y onírico del film. Porque de eso va la película: un experimento embriagador y lírico que trastoca el lenguaje cinematográfico y la trama habitual en las pelis de chupasangres. "La violación de la vampira" no es una película de género al uso. Jean Rollin otorga a las imágenes una fuerza simbólica que toma el control de la película, imponiéndose a la trama del film. En un correcto blanco y negro, Rollin despliega momentos de quietud e inquietud que lastran deliberadamente el desarrollo de la historia, marcando un ritmo bastante lento que no será del gusto de todo el mundo. Las escenas poseen un minimalismo muy bello y sencillo, sobre todo en los exteriores, con esa playa desolada y perdida (al igual que los personajes) o ese erótico combate de las vampiresas delante de la mansión, a la luz de las antorchas, intuyéndose las gráciles y bellas siluetas de las señoritas.
Los actores poseen un toque muy de cine mudo que resulta fascinante, acentuando la expresión de sus rostros para dar más fuerza a los sentimientos, creando una sensación de teatralidad muy acorde con el espíritu del film (también hay escenas que recuerdan las escenas cómicas de Buster Keaton o Harold Lloyd) . En mi papel de macho alfa, debo señalar la belleza de las actrices, que todas están para hacerles un piropo, aunque a nivel interpretativo también están muy bien. Cada una ejemplifica un estado de ánimo: desolación, desesperación, confusión, ira, esperanza o maldad.
La película se divide en dos partes muy desiguales entre sí: la primera es la más convencional, donde se narra el intento del psicólogo por sanar la mente jodida de las vampiresas. La historia es una alegoría de los abusos de los terratenientes y la aristocracia, que a través de la ignorancia y la superstición mantiene a la plebe engañada, aprovechándose de ellos en todos los sentidos. Sólo un discurso científico-analítico del copón puede liberar a las masas ignorantes del yugo explotador. La trama es clara e incluso un poco predecible, excepto por su final, trastocando todo el discurso racional del segmento. En la segunda parte, Jean Rollin se lía la manta la cabeza y la lía parda con una historia que mezcla vampiros, sectas misteriosas, muertos vivientes autómatas y la madre que los parió. El vampirismo es entendido más como una enfermedad que como una maldición paranormal y el director no se corta en mezclar elementos científicos y fantásticos, manteniendo el espíritu de la primera parte: la necesidad de acabar con la esclavitud intelectual de las masas a través de la ciencia y la razón, con dos cojones (y si los opresores se resisten, pues se monta una Revolución como la Francesa y santas pascuas)
En fin, "La reina de las vampiras" es una película muy interesante aunque también un pelín difícil de ver. La recomiendo disfrutar a sorbos pequeños, paladeando la belleza de las escenas. Por cierto, este film forma parte de una trilogía vampírica, que se completa con "La vampiresa desnuda" (1970) y "El amanecer de los vampiros" (1971).
Aquí os dejo un trailer del film, cortesía de IMACACI2.

hombre con rayos X en los ojos, El

El hombre con rayos X en los ojos (X: the man with the X-ray eyes, 1963, USA)
Dirección: Roger Corman
Producción: Roger Corman para American Internacional
Guión: Robert Dillon y Ray Russell
Género: Científicos locos e inconscientes que no saben lo que hacen y así les luce el pelo
Intérpretes: Ray Milland, Diana Van der Vlis, Harold J. Stone
Sinopsis: Un super-oculista ha inventado unas gotas para los ojos que sirven para ver a la gente por dentro y así decirles qué enfermedad tienen sin tener que abrirles en canal. El muchacho no tiene otra idea que probarlo consigo mismo y claro, de tanto echarse mierda en los ojos al final los huevos oculares le escuecen un montón. Un amigo suyo intenta quitarle el puñetero gotero pero el de los rayos x le tira por la ventana sin querer y huye a las Vegas para forrarse de billetes y ver a las tías en pelotas.

"El hombre con rayos X en los ojos" es una de las mejores películas de Roger Corman y paradigma de lo que tiene que tener una buena peli de serie B: pseudociencia sonrojante sin pies ni cabeza pero que suene convincente; un protagonista con carisma que lo mismo te inventa un supermedicamento como que se liga a la guapetona del film; persecuciones de coches y alguna hostia y/o muerte; y un final impactante (y el final de esta película es MUY impactante). Por cierto, me encantan esos colores a lo "Frutopía" que por aquella época quedaban muy molones, en pleno "power-hippie" con sus viajes alucinatorios. El único "pero" que le encuentro a la peli es esa moraleja subyacente un tanto reaccionaria que, en mayor o menor medida, tienen todas las películas de "mad doctors": ¡Científico, no intentes superar los límites de la naturaleza o serás castigado por ello!", pero en fin, como Roger Corman es un tío muy salao se lo perdonamos.
Aquí os dejo el trailer del film, cortesía de EstrellaMatutina666.


Hasta el viento tiene miedo


Hasta el viento tiene miedo (Hasta el viento tiene miedo, 1967, México)
Dirección: Carlos Enrique Taboada
Guión: Carlos Enrique Taboada
Género: Fantasmas de ultratumba (¿de dónde si no?) y sexualidad reprimida
Intérpretes: Marga López (la directora mala), Maricruz Olivier (la profe buena), Alicia Bonet (se pasa la mitad de la película poseída por una fantasma) y Norma Lazareno (interpretando a Kitty, la estudiante exhibicionista que a la mínima te monta una orgía como en París)
Sinopsis: Claudia es una muchacha muy linda que estudia en un internado para jovencitas bien. De día mueve las cejas sin parar; de noche tiene unos sueños un tanto curiosos: una voz misteriosa de mujer la llama y cuando Claudia va a ver quién es, se encuentra a otra estudiante ahorcada con la lengua fuera. Con tanta pesadilla, Claudia está malita de los nervios y no tiene cuerpo para estudiar pero la directora no se cree el cuento y la castiga a ella y a sus amigas a quedarse en el internado por vacaciones. Pues bien, en esas vacaciones, a las muchachas se les presentará el fantasma de Andrea, una antigua estudiante que se colgó del techo porque la directora la reprimía intelectual y sexualmente con tanta disciplina. Las muchachas, para quitarse el susto y relajarse, harán un striptease.

La tetralogía del terror fantasmal mejicano compuesta por el gran director Carlos Enrique Taboada (México D.F. 1929-1997) que incluye "El libro de piedra", "Más negro que la noche" y "Veneno para las hadas" comienza con este film, "Hasta el viento tiene miedo", una gran película de fantasmas en la onda de la literatura anglosajona de terror gótico del siglo XIX. ¿Te gustan los relatos de miedo de Henry James, Robert Louis Stevenson, Mary Shelley o M.R. James? Pues ponte contento, porque Carlos Enrique Taboada consigue plasmar en sus películas la esencia de estos cuentos de susto clásicos donde priman las atmósferas tétricas y siniestras, pero también los momentos poéticos, melancólicos y románticos, todo ello expuesto con una refrescante sencillez argumental pero con una compleja puesta en escena al servicio de la historia y de los personajes. Pero sobre todo destaca la honradez del director, que en ningún momento quiere inventar la rueda ni marearnos con sorpresas inesperadas o piruetas argumentales. La historia que cuenta "Hasta el viento tiene miedo" es sobria, pausada e incluso fácilmente predecible. Es un relato clásico de almas en pena que quieren vengarse de los vivos sí o sí por haberlos fastidiado en vida, imparables en su deseo de venganza hasta haber conseguido sus propósitos de muerte y escarnio. No hay sorpresas ni trucos fáciles o baratos. La trama es sólida, la puesta en escena es interesante y el espectador disfruta de los momentos que tanto le asustaban de pequeño (y de mayor también): una puerta que chirría en la oscuridad, una inesperada luz en la ventana de una torre vieja y abandonada, un susurro desesperado que te llama en mitad de la noche...elementos clásicos y comunes del género de fantasmas que en manos de un buen director siguen siendo eficaces. Y Carlos Enrique Taboada era un buen director.
En cuanto a los personajes de la peli, destacan Marga López (en su papel de inflexible directora más mala que un dolor) y Maricruz Olivier (en su papel de maternal profesora más buena que el pan). En el apartado estudiantil, tenemos a un grupo de muchachas potentes y requetechulas, pero quizás un poco mayores para la edad que se supone que tienen sus personajes (en teoría son estudiantes adolescentes pero aquí la media de las chicas no baja de los 20 años) (dejando a un lado a Norma Lazareno, que está muy feo hablar de las edades de las señoritas, pero cuando hizo la película tenía 28 años más o menos). La protagonista del film (y vehículo del espíritu atormentado de Andrea) es Alicia Bonet, una monería de muchacha más guapa que un San Luis pero con un pequeño defecto. Cuando Don Luis Buñuel empezó a rodar en México, no le gustaba que los actores movieran las cejas continuamente y de manera exagerada, porque restaba seriedad a su personaje. Pues bien, Alicia Bonet no es que mueva las cejas, no, ¡es que sus cejas están vivas y tienen autonomía propia! Gloria bendita, mueve tanto las cejas que te quedas hipnotizado: arriba, abajo, arriba, abajo...bueno, dejando a un lado este pequeño detalle, la muchacha hace una buena interpretación, entre asustada y ausente (según la proximidad del fantasma de Andrea). Pero mi personaje favorito es, sin lugar a dudas, Kitty, la estudiante rebelde, dicharachera y un poco casquivana, el alma del internado y sexualmente activa, pero la pobre mía tiene un peinado horroroso que no le hace ningún favor ya que le hace parecer más vieja ¡Rupert, te necesito!
Carlos Enrique Taboada, además de buen director, tenía un buen ojo comercial y sabía que un internado femenino tenía mucho potencial a nivel erótico en su variante morbosa, por toda esa sexualidad reprimida y los socorridos conatos de lesbianismo latente. Por todo esto, el director muestra una serie de escenas sugerentes que sin mostrar nada lo dicen todo, y la elegancia y el buen gusto de las imágenes no le restan sensualidad al contenido. Tenemos un poco de todo: momentos en la ducha, celos e interés extra-curricular entre la directora y la profesora, tocamientos inocentes y, por supuesto, la genial escena del strip-tease (que desinteresadamente reproduzco un poco más abajo), uno de los momentos más bizarros, surrealistas, divertidos y alucinantes del cine de fantasmas de todos los tiempos. En cuanto al final de la peli, tenemos un tranquilizante "happy end": cumplida la justa venganza de la fantasma, todo vuelve a la normalidad y a otra cosa, mariposa. Aunque el desenlace de la película es lógico, quizás le falte algo de impacto y de mala leche. Pero no os preocupéis, las otras tres películas de fantasmas del director tienen unos finales inolvidables (je, je, je, sus váis a cagal...)
En fin, "Hasta el viento tiene miedo" es una gran película del culto del cine de terror mejicano y un ejemplo más de que la Hammer o cualquier otra productora inglesa o gringa no tenían la exclusiva en la realización de buenas películas de género. En su momento, la película de Carlos Enrique Taboada tuvo un éxito enorme y varias generaciones la recuerdan con cariño, por su sencillez, por su sinceridad y por su buen hacer (y por Kitty, no le quitemos mérito a la muchacha). Además, la peli conocerá remake en el 2007, de la mano del director Gustavo Moheno. Hay que verlas.
Aquí os dejo un trailer artesanal hecho por ocirnus.




Y como lo prometido es deuda, aquí os dejo la escena del streptease, escena colgada con muy buen gusto por mfmg.
"o bailas...¡o te echamos al tanque!"

¿Qué sucedió entonces?


¿Qué sucedió entonces? (Quatermass and the pit, 1967, GB)
Dirección: Roy Ward Baker
Productora: La Hammer
Guión: Nigel Kneale
Género: Ciencia-ficción británica
Intérpretes: James Donald, Andrew Keir, Barbara Shelley
Sinopsis: Haciendo unas excavaciones para el metro de Londres, unos picapedreros encuentran un platillo volante enterrado en el fango y claro, estalla la polémica porque unos dicen que son los extraterrestres y otros que son los nazis que durante la segunda Guerra Mundial mandaron esta nave para despistar. Pero que no cunda el pánico, que aquí está el Doctor Quatermass que ha encontrado la solución: que ni pa ti ni pa mí, que la nave es de unos marcianos que se pegaron el hostión hace millones de años y de paso crearon a la raza humana (y toda esta teoría sin desayunar el tío). Pues bien, el problema surge cuando los espíritus de los marcianos empiezan a dar pol culo...
_
Tercera entrega de la saga de Quatermass y de la peculiar visión de la ciencia-ficción británica, muy influenciada por el cine USA pero con un estilo propio, que va de lo camp a lo sobrio, con claras influencias de los mitos de Cthulhu de Lovecraft. Esta última entrega de la saga del doctor tiene unos cambios evidentes (a parte de que esta es en colour y las otras dos en blanco y negro): para empezar, el actor protagonista que encarna a Quatermass es otro (James Donald), que el anterior, Brian Donlevy, ya tenía que estar muy viejuno. Por otro lado, el carácter cortante, agrio y chulesco de Quatermass se suaviza un poco y ahora el doctor es algo asi como un osito de peluche entrañable incapaz de poner los huevos sobre la mesa como hacía su anterior encarnación. No obstante poco importa, porque la película es una obra maestra del género con un Roy Ward Baker que se sale, manteniendo el ritmo de suspense y misterio sin necesidad de alharacas espectaculares ni golpes de efecto, simplemente contando una buena historia con sus personajes carismáticos y sus bichejos extraterrestre (eso sí, el final es la bomba).
"¿Qué sucedió entonces?" es una pedazo de película de visionado obligado, al igual que el video que he hecho y que tiene música de Siniestro Total.


caída de la casa Usher, La


La Caída de la casa Usher (The fall of the House of Usher, 1960, USA)
Dirección: Roger Corman
Guión: Richard Matheson, basado en un relato de Edgar Allan Poe
Intérpretes: Vicent Price, Mark Damon, Myrna Fahey, Harry Ellerbe
Género: Gótico americano exploitation
Sinópsis: A mediados del siglo XIX, un mocetón aburguesado va a la casa de su prometida para pedirle en matrimonio. Da la casualidad que la casa es la Casa Usher de Edgar Allan Poe, que está maldita por la maldad y la corrupción de sus antiguos inquilinos. Bueno, la muchacha está loca de contenta por irse con el mocetón, pero el hermano de la muchacha (Vicent Price) se lo impide, porque dice que su estirpe está condenada y que si no se mueren en un pis pas, se vuelven locos superfuertes. Pero el mocetón ni caso, que es muy cabezón...

"La caída de la casa Usher" fue el primer gran éxito de Roger Corman: la hizo con cuatro duros en un tiempo record y el hombre se forró de billetes. También es la primera película de la saga de Edgar Allan Poe, que contaría con títulos como "La máscara de la muerte roja", "Historias de terror" o "El péndulo de la muerte", la mayoría protagonizadas por el gran Vicent Price, el mítico actor de cine de terror. Aunque la adaptación es bastante libre (el romance entre el mocetón y la muchacha se lo sacan de la manga, aunque era obligado en una película exploit) recoge la esencia del relato de Poe: la atmósfera malsana que envuelve a la mansión y que será la perdición de sus habitantes. Algunos efectos especiales cantan un poco, pero en general la película está muy bien, un clásico impoluto del exploit norteamericano.
Aquí os dejo el trailer, por cortesía de
bigsugar316.