Kinski, Klaus

KLAUS KINSKI. Actor con los cojones muy grandes. El bueno de Klaus, que en paz descanse, era más peligroso que una caja bombas. Histriónico, obsesivo, egocéntrico, truculento, blasfemo, impulsivo y más bestia que un arado, este genial actor hizo de su nombre una leyenda terrorífica para el espectador y sobretodo para los directores que trabajaron con él. Dentro del cine friki, Kinski hizo un montón de pelis de terror (con esa cara se ahorraba el maquillaje y todo): “Los ojos muertos de Londres” o “El pañuelo asesino” con Alfred Vohrer; “La muerte tenía un precio” o “Por un puñado de Dólares” con Sergio Leone; “Nosferatu, vampiro de la noche” con Werner Herzog (director con el que se llevaba a matar, pero la química entre ambos era innegable ); "Nosferatu en Venecia"de Augusto Caminito; “El Caballero del dragón” de Fernando Colomo o "Creature" de William Malone. Pero la traca fue cuando Kinski conoció a Jesús Franco y se juntaron el hambre con las ganas de comer. Fue amor a primera vista y juntos hicieron las películas más bizarras del género: “Marqués de Sade: Justine”, “Paroxismus: Venus in Furs”, “El Conde Drácula” y “Jack el destripador”, la mayoría de ellas con un nexo en común: el despelote y el sexo. Y es que Klaus Kinski era un picha brava sin complejos y si en la película podía arrimar cebolleta con las actrices, mejor. Por otra parte, una de las mayores aportaciones que hizo Klaus Kinski a la humanidad fue su hija Natacha Kinski.















































































Zombie Atómico

Zombie atómico. Bicho. Variante zombie que suele congregarse en las proximidades de la M-30 y del Parque de atracciones de Madrid, aunque tampoco le hace ascos a hospitales, estudios de televisión, iglesias y bares de carretera. Superando a los zombis de Zack Snyder, los zombies atómicos pueden correr, empuñar cuchillos, disparar metralletas, pilotar aviones y bailar un chotis. Su origen es nuclear, por lo visto hubo una fuga de gas radiactivo en la central nuclear del estado y se convirtieron todos. Su líder espiritual es el Profesor Haikenberg. Estos zombies tienen muy mala leche, además de ser unos hijos de puta, ya que te matan de la manera más cabrona y sádica del mundo, y si eres mujer, te rompen la blusa para que se te vean las tetas. Salen mucho en "La invasión de los zombies atómicos".

McColl, Katherine

Katherine McColl. Actriz y diosa. Su verdadero nombre es Catriona y nació en Londres en 1954. Fue musa de Lucio Fulci y tuvo que aguantar sus inconsistencias de guión y sus perrerías varias: en "Miedo en la ciudad de los muertos vivientes" fue enterrada viva y tuvo que comer gusanos; en "El más allá" los zombies cabrones la tiraban del pelo; y en "Aquella casa al lado del cementerio" se le puso la carita colorada con la escena de la escalera. Hizo un montón de cosas para la tele y el cine, pero casi todas fuera del mundo fantástico, terrorífico o friki. No obstante, participaría en la peli de terror francorrumana "El internado" (Pascal Laugier, 2005). Su paso por el cine de terror fue corto pero intenso y miles de fans la tenemos en nuestro corazoncito como una segunda madre.



































Freudstein, Dr.


Dr. Freudstein. Bicho. Antiguo doctor en medicina descubridor de la fórmula de la inmortalidad: beber la sangre de los niños. Lo malo es que se te queda esta cara de pasa seca con los ojos achinaos y la boquita de piñón. Es superfuerte e invulnerable aunque su interior está formado por mierda de vaca concentrada. Le jode mucho que la gente se mude a su casa. Tiene predilección por las escaleras y las mujeres voluptuosas. La última vez que se le vio fue en "Aquella casa al lado del cementerio".